Abogar por los derechos humanos en Honduras
Las Hermanas de la Misericordia han estado respondiendo a los abusos contra los derechos humanos en Honduras, un país en el que vivimos y servimos, desde un golpe de estado en ese país en junio de 2009. Las delegaciones de la Misericordia de los Estados Unidos han visitado Honduras y, a su regreso, trabajan con otros defensores de los derechos humanos para instar al Congreso y al Departamento de Estado a que retengan la asistencia a las fuerzas de seguridad hondureñas hasta que se restauren el respeto a los derechos humanos y el respeto por la ley.
Situación Actual
La situación de los derechos humanos en Honduras después de las elecciones presidenciales a finales de noviembre ha estallado. Nuestras hermanas y asociadas y otros activistas de derechos humanos en el país nos dicen de la violencia de parte de las fuerzas de seguridad del estado contra los manifestantes que piden un recuento o nuevas elecciones, dadas las preocupaciones acerca de la legitimidad de los resultados. Desde la declaración prematura de un ganador y el reconocimiento estadounidense de esa declaración, la represión de los manifestantes sólo ha aumentado.
El liderazgo de las Hermanas de la Misericordia ha estado en estrecho contacto con nuestras hermanas y asociadas hondureñas. Miembros del Equipo de Liderazgo del Instituto y el Equipo de Justicia del Instituto han contactado a Senadores de los Estados Unidos y han participado en una vigilia frente al Departamento de Estado de los Estados Unidos para llamar la atención sobre la situación en Honduras. Seguiremos realzando la visibilidad de lo que está sucediendo y, al hacerlo, proporcionaremos cierta medida de protección a activistas y manifestantes. Insten a sus legisladores a exigir acciones de solidaridad.
Delegación de emergencia
Cincuentaiséis líderes de fe y defensores de justicia social de EE. UU., Canadá, Colombia, Argentina y El Salvador, incluyendo la Hermana Kathleen Erickson, la Hermana Marilyn Goettemoeller, la Hermana Ana Siufi; Jean Stokan (del Equipo de Justicia del Instituto) y Roxana Bendezu viajaron a San Pedro Sula, Honduras del 24 al 30 de enero para solidarizarse con nuestras hermanas y asociadas/os allí, y para observar directamente el continuo descontento generalizado. Esta delegación de fe y de emergencia busca un fin inmediato a la violencia, al derramamiento de sangre y a los arrestos en Honduras; un alto a la represión policial y militar del pueblo hondureño y a los ataques a defensores de derechos humanos; la suspensión de la ayuda financiera de EE. UU. a las fuerzas de seguridad hondureñas; y un amplio y significativo diálogo por la paz. Lean más sobre esta delegación de emergencia.
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